Hoy en
día aún quedan leyendas del deporte vivas, y poco a poco se van forjando
algunas nuevas. Si nos ponemos a buscar nombres propios de cada disciplina
podemos encontrar algunos de cada una, pero siempre sobresaldrá alguno entre
los demás. Y si nos centramos en el baloncesto, ¿qué otro nombre nos sobrevuela
(nunca mejor dicho) la cabeza? Michael Jordan.
Si
juegas al baloncesto y ganas, en la mejor liga del mundo, seis anillos con el
mismo equipo, promedias 30.1 puntos por partido, recibes diez veces el galardón de máximo anotador, cinco MVP de la
temporada y seis MVP de las finales. ¿Quién se va a plantear discutirte el
título de jugador de baloncesto más conocido del mundo? No sólo en ataque se
prodigaba este jugador, también fue nombrado en nueve ocasión componente del
mejor quinteto defensivo de la temporada. Y para terminar con la sucesión de
galardones, líder en robos de balón durante tres años y un premio al mejor
defensa de la temporada. Aún quedan muchos más títulos individuales logrado por
Air Jordan, pero detengámonos aquí.
Marcó
un antes y un después en el baloncesto americano, tanto en el juego (formó
parte del Dream Team de la selección
americana) como en la publicidad. En esta última faceta dio alas a Nike para
convertirse en una de las marcas más importantes de nuestros tiempos. No todo
el mundo lo vio jugar en directo o por televisión, yo puedo decir que vi un
cuarto de uno de los muchos partidos que disputó, que para mi edad y afición al
baloncesto es bastante. Era increíble verlo recorrer la cancha de un lado a
otro, no sólo era un temible atacante si no que sus habilidades defensivas eran
igual de efectivas (actualmente es el número dos en la historia del baloncesto
americano en cuanto a robos de balón, con un total de 2.514). Era un escolta
natural, pero podía intercambiar las posiciones de base o alero si era
necesario. Esta versatilidad lo convirtió a él y a los Chicago Bulls de su
época en leyendas. No hay que restar protagonismo a sus compañeros de aquellos
años, pero creo que sin Jordan hubiera sido imposible alcanzar esos registros.
Admiro
profundamente a este jugador, tanto dentro como fuera de los pabellones. Hay
poco que reprocharle en su vida tanto profesional como en la privada, no como a
otros deportistas “profesionales” que destacan más por sus escándalos que por
otra cosa. Lo único en lo que pudo haberse equivocado o haber fallado fue sus
retiradas del deporte profesional. La primera el 6 de Octubre de 1993 que le
llevó a jugar al baseball sin pena ni gloria, volvió a la NBA en 1995. La
segunda retirada se produjo el 13 de Enero de 1999 y regresó como jugador de
los Washington Wizards el 25 de Septiembre de 2001. Cabe decir que después
de la primera reaparición logró tres anillos de la NBA más, los de 1996, 1997 y
1998, por lo que puede que le viniera bien un pequeño descanso. Hablamos de un
jugador en mayúsculas, por lo que no quiero criticar lo que hizo,
tendría sus motivos, pero no soy partidario de estas cosas.
Un deportista total que dejó maravillados a millones
de personas, el mismo se forjó un nombre en el salón de la fama del baloncesto
para que nadie olvide jamás quién fue. Un jugador, probablemente irrepetible,
que se ganó el afecto de espectadores, compañeros y rivales. Tanto es así que
en su última retirada todos los pabellones en los que jugó tras el anuncio se
rindieron a él. Los aficionados de los equipos rivales no paraban de
ovacionarlo. En una ocasión, el mismo Jordan tuvo que pedir que pararan. Fue el
más grande y la gente lo sabía y lo sigue sabiendo. Todos lo sabemos.
A pesar que yo siempre tuve inclinacion por Dominique Wilkins ( Atlanta Hawks ), rival de Jordan en los concursos de mates, si es cierto que Jordan consiguio hacer de un equipo o franquicia deprimente, un autentico espectaculo con titulos.
Respecto a su forma de ser, si es cierto que siempre se le acusó de cierta arrogancia hacia parte de sus compañeros y del staff tecnico que lo gestionoó durante su etapa profesional. Ademas, era conocido por su gran aficion al juego.....
Y que sepan ustedes, que Jack Haley, eterno 12º jugador de los Bulls de Jordan, jugó en el RCD Español de Baloncesto en los 80 justo despues de acabar su etapa universitaria y previo a ganar titulos con los Bulls de Air.
A pesar que yo siempre tuve inclinacion por Dominique Wilkins ( Atlanta Hawks ), rival de Jordan en los concursos de mates, si es cierto que Jordan consiguio hacer de un equipo o franquicia deprimente, un autentico espectaculo con titulos.
ResponderEliminarRespecto a su forma de ser, si es cierto que siempre se le acusó de cierta arrogancia hacia parte de sus compañeros y del staff tecnico que lo gestionoó durante su etapa profesional. Ademas, era conocido por su gran aficion al juego.....
Y que sepan ustedes, que Jack Haley, eterno 12º jugador de los Bulls de Jordan, jugó en el RCD Español de Baloncesto en los 80 justo despues de acabar su etapa universitaria y previo a ganar titulos con los Bulls de Air.